La descarga de Buenafuente en los Goya

LA DESCARGA DE BUENAFUENTE EN LOS GOYA

He de reconocer que vi muy poco rato de la Gala de los Goya. Tras la descarga ¿ilegal? de Buenafuente y el discurso del ya dimitido presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, Álex de la Iglesia, empezó lo que me pareció un mal “remake” de los Oscares jolivudienses y fui incapaz de soportar la Gala mucho más tiempo.

¿Fue legal la descarga de Buenafuente…?

Existía mucho morbo en el discurso de Álex de la Iglesia para comprobar su reafirmación en la discrepancia que ha mantenido con su antecesora en la Academia y actual ministra del ramo, la ministra Sinde.

Y aunque llegaron del brazo a la gala, la realidad es que “llegamos a este día separados, con puntos de vista diferentes en temas fundamentales. Es el resultado de la lucha de cada uno por sus convicciones”, dijo de la Iglesia en su discurso dirigiéndose especialmente a la ministra Sinde.

Sin embargo, en la vida hay quien lucha por sus convicciones y otros muchos que aparcan las convicciones para dejar paso a los intereses de todo tipo. Lleva razón de la Iglesia cuando afirma que “de las decisiones que se tomen ahora dependerá todo. Nada de lo que valía antes, vale ya. Las reglas del juego han cambiado”.

Se refería de la Iglesia a unas decisiones que ya han sido tomadas en la controvertida Ley Sinde, en la Ley de Economía Sostenible. En la ley donde, tras la pretendida defensa de los creadores, unos presuntos “censores” podrían llevar a cabo una política de criminalización de los ciudadanos (internautas) al dictado de las entidades de gestión de derechos de autores y editores y las multinacionales que dominan la industria cultural del cine.

Continuaba Alex de la Iglesia con su acertado análisis: “hace veinticinco años, quienes se dedicaban a nuestro oficio jamás hubieran imaginado que algo llamado Internet revolucionaría el mercado del cine de esta forma y que el que se vieran o no nuestras películas no iba a ser sólo cuestión de llevar al público a las salas. Intenet no es el futuro, como algunos creen. Internet es el presente. Internet es la manera de comunicarse, de compartir información, entretenimiento y cultura que utilizan cientos de millones de personas. Internet es parte de nuestras vidas y la nueva ventana que nos abre la mente al mundo. A los internautas no les gusta que les llamen así. Ellos son ciudadanos, son sencillamente gente, son nuestro público. Ese público que hemos perdido, no va al cine porque está delante de una pantalla de ordenador. Quiero decir claramente que no tenemos miedo a internet, porque internet es, precisamente, la salvación de nuestro cine”.

Y, estando en acuerdo total con de la Iglesia, añado yo que si a los ciudadanos no nos gusta que nos llamen internautas -¿quién no navega por internet hoy día?- menos nos gusta que nos llamen piratas unos analfabetos condenados eternamente a la brecha digital o lo que es peor, aquellos que se esconden tras el falso argumentario defensor de la creatividad y que realmente son agentes de los poderosos intereses de la industria multinacional del cine.

Una ejemplar lección de humildad y respeto hacia el público de Alex de la Iglesia desde la apuesta por la necesaria transformación de la industria del cine para adaptarse a la nueva realidad de Internet.

Alterio 

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