Lady Gaga aprovecha la noche de Halloween y no se disfraza

Halloween es la noche anglosajona de los disfraces. Esta costumbre tan arraigada en esos lares está también pegando en nuestro país cada vez con más fuerza

Aunque como dice Paul Bitternut, “ésta fiesta no proviene de Yankilandia sino que su origen se remonta a los celtas quienes, para mantener a los espíritus contentos y conseguir alejarlos de sus viviendas, les dejaban comida y dulces…”.

Foto: Lady Gaga no se difraza

El cambio de estación para los celtas era mágico y el festival a Samhai (Dios de los muertos) representaba el último día de la cosecha y el comienzo del invierno. Los druidas de la tribu se ponían en contacto con los difuntos y celebraban todos esa noche. Esta es una de las versiones de la archifamosa fiesta de Halloween.

El mimetismo sociológico hacia todo lo yanqui ha hecho que Halloween haya sido exportado a España con fuerza desplazando otros rituales y costumbres seculares de nuestras tradiciones.

Durante muchos años la festividad de Todos los Santos ha sido la fecha en la que en toda España se ha representado el Tenorio, y han sido numerosas las funciones del mismo que han gozado de fama. Dicha costumbre ha ido desapareciendo, salvo raras excepciones, siendo sustituida por otras más modernas que han llegado desde el exterior tales como Halloween: carnaval, pero menos.

Los españoles más talluditos recordarán aquellas noches de los años 50, antes de que llegara la televisión a este país, en las que la radio era la protagonista de esta noche de Todos los Santos con la audición, hoy serían llamados “podcast”, de las representaciones de Don Juan.

No hay mejores imágenes que las que uno se imagina y, esas noches, cada uno veía la obra de Zorrilla con sus propias imágenes. Casi a media luz; porque el alumbrado de entonces, público y doméstico, no se parecía en nada al de hoy. En aquellos oscuros tiempos la diferencia entre el día y la noche era clarividente. A veces había que imaginarse a don Juan y a doña Inés entre velas. Las velas de los sufridos radioescuchas, claro. Eran años de restricciones eléctricas habituales y copiosas.

Mayores y menos mayores se reunían alrededor de la mesa camilla y, entre castaña y castaña y una copita de anís para los adultos, nos imaginábamos el escenario cada uno como queríamos. Esa libertad no nos la podía quitar ni el propio Franco que, quizás, también estuviese escuchando a don Juan en Radio Madrid con su famosa “lucecita del Pardo”.

Hacía medio siglo que el “nobelado” Marconi había patentado la radiofonía en Londres y, en España, la radio sólo llevaba funcionando 25 años. El día 10 de noviembre de 1924 Radio España (EAJ5) empieza a emitir, y el día 14 Radio Barcelona (EAJ1). Radio España detuvo sus emisiones durante un tiempo y Radio Barcelona no ha parado desde entonces. Por eso es la decana de la radio española.

Fotos: aparato de radio, Boby Deglané, Matilde Conesa, Pedro Pablo Ayuso y Matilde Vilariños, Juana Ginzo y la Operación Plus Ultra, en la cadena SER.

 Por supuesto, este tipo de emisiones eran espacios para distraer al personal “dentro de un orden”. Los espacios “informativos” eran monopolio de Radio Nacional con los llamados “partes”. Uno a las dos y media y el otro a las diez de la noche, hora en la que todos tenían que estar en casa”. Particularmente, ellas.

Y entre “conspiraciones judeo-masónicas”, inauguración de pantanos y truchas colosales pescadas por Franco, los exclusivos informativos de Radio Nacional fueron exclusivos ni más ni menos que hasta 1977, en que comienza la Transición a la democracia en España.

El único refugio de los silenciosos discrepantes del “régimen” era Radio Pirenaica; lo que hoy llamaríamos la “contraprogramación”. Lo único que tenía en común con Radio Nacional era toda la retahíla de embustes y propaganda –diferentes, claro- que contaban ambas.

Pues bien; retomando las noches “jalowinianas” de la España de los 50, es decir, de todos los Santos y Difuntos, recordaré algunos nombres de la gran compañía de actores que nos representaban a don Juan Tenorio: Pedro Pablo Ayuso, Matilde Conesa, Eduardo Lacueva, Rafael Taibo, Teófilo Martínez, Fernando Dicenta, Alicia Altabella, Juana Ginzo… Nombres que, si se los recordáis a vuestros padres o abuelos, podréis observar como esbozan una nostálgica sonrisa.

Pero don Juan Tenorio ya no se representa por la radio, como ocurría invariablemente la víspera del primero de noviembre. Tampoco se representa en televisión porque quitaría espacio a Gran Hermano y a los cotilleos habituales de las cadenas de TV.

Pero ya quisieran estos espacios tener el “share” –así le llaman ahora los jalowinianos- que tenía Radio Madrid entonces con don Juan y doña Inés.

En definitiva, no se trata de oponer a Halloween frente a don Juan, pero tampoco deberíamos perder nuestras costumbres ancestrales sustituyéndolas por fórmulas importadas esnobistas y comerciales.

Lady Gaga ha anunciado a bombo y platillo que se irá a un bar la noche de Halloween a tomar unas copas y que no se disfrazará. No debería costarle ningún esfuerzo no disfrazarse esta noche; ya lo hace las 364 noches restantes del año.

No es que seamos antiyankis, no. La prueba es que finalizaremos nuestro comentario parafraseando a Bogart en la excelente película “Casablanca”:

"Siempre nos quedarán los buñuelos y los huesos de santo…"

Antonio Montes Delgado

RLC

Fotos radio vía Junta de Andalucía

Ver: Noche de Halloween, Difuntos y de Todos los Santos

Últimos artículos

La Revista en tu e-mail

La Revista en tu movil